SÍNDROME DEL COLON IRRITABLE

Síndrome del colon irritable

El síndrome del colon irritable es un trastorno crónico que se caracteriza por períodos asintomáticos junto a recaídas frecuentes y que afecta a la motilidad o cambios de ritmo del tracto intestinal y que causa diversos síntomas que, dependiendo de la persona, van desde dolor abdominal, estreñimiento y/o diarrea.

Aunque no se conozca exactamente la causa del síndrome del colon irritable, se cree que puede estar causado principalmente por factores psicológicos; también se cree que podrían influir en el colon irritable otros factores como son las enfermedades gastrointestinales, intolerancias alimentarias, alteraciones hormonales y factores genéticos. 

Tiene mayor incidencia entre las mujeres y los períodos de estrés y de conflicto emocional con frecuencia suelen exacerbar los episodios del síndrome.

Entre los síntomas más comunes se encuentran el dolor abdominal, la diarrea y/o el estreñimiento, gases, saciedad precoz tras la ingesta, sensación de evacuación incompleta, presencia de moco en las deposiciones, cansancio, nausea, vómitos. Normalmente estos síntomas no se dan durante la noche, suelen respetar el sueño.

El colon irritable es un síndrome crónico pero benigno. El principal problema estriba en la calidad de vida, las limitaciones sociales y la percepción de la salud que causan tales síntomas.

Consejos prácticos que nos ayudarán a reducir los síntomas en momentos de recaída y también cambios que deberemos realizar en nuestra vida cotidiana para que nos ayuden a tener una mejor calidad de vida:

1. Acudir al médico: ante todo y sobre todo, acudir al médico para que nos realice las pruebas necesarias y tener un diagnóstico veraz.

2. Dieta:

    - Evitar comidas copiosas, masticar bien y comer en un ambiente relajado.
    - Evitar en la medida de lo posible o temporalmente aquellos alimentos y bebidas que empeoren nuestros síntomas: tabaco, café, té, especias, alcohol, bebidas gaseosas, productos lácteos, trigo, bollería industrial...etc.
    - Si padecemos de:
        - Estreñimiento: aumentaremos la ingesta de productos ricos en fibra tales como frutas, verduras y cereales.
         - Diarrea: evitaremos los derivados lácteos, café, té y chocolate.
        - Gases: evitaremos alimentos flatulentos como el pollo, col, garbanzos, lentejas, cebollas, puerros, guisantes, frutos secos y en conserva...etc.

3. Ejercicio:

    Es muy importante hacer ejercicio regularmente, pues por un lado nos ayudará a mejorar la digestión y a regular el ritmo intestinal y por otro nos ayudará a liberar tensiones y mejorar el manejo del estrés.

4. Hierbas para el colon irritable

    - Manzanilla: antiinflamatoria, antiespasmódica, relajante y carminativa, está indicada para los problemas digestivos relacionados con la tensión nerviosa. Indicada en caso de que suframos de dolores abdominales, indigestión y gases.
    - Melisa: nervina, carminativa y antiespasmódica, está indicada en casos de indigestión y gases. Combina bien con la manzanilla.
    - Hinojo: carminativa y antiespasmódica, aparte de ayudar a dispersar los gases, le aportará a la infusión un sabor dulce y anisado.
    - Regaliz: antiinflamatoria y demulcente, ayuda a reducir la inflamación del estómago y también le da un sabor dulce a la infusión.
    - Pasiflora: sus propiedades ansiolíticas y sedantes nos ayudarán en caso de que suframos de ansiedad, estrés nervioso, espasmos digestivos, palpitaciones o insomnio.
    - Verbena: tónico nervioso, la verbena fortalece el sistema nervioso y está indicado en casos de agotamiento nervioso.
    - Tila: sedante, antiespasmódico e hipotensivo, utilizaremos la tila en casos de ansiedad, insomnio, dolor de cabeza debido a la tensión y palpitaciones.

5. Consejos prácticos de cómo preparar una infusión

     En primer lugar elegiremos las hierbas que más se ajusten a nuestra situación o a nuestras necesidades. Yo personalmente os recomiendo que elijáis entre 4-5 hierbas. Añadiremos 1 parte de cada hierba seca que hayamos elegido (ej: 1 parte=25 g), menos del regaliz, que si lo añadimos a la mezcla la dosis recomendada es de 1/5 parte (5 g). Mezclamos las hierbas y preparamos la infusión. Para ello colocamos en una taza una cucharilla colmada de las mezcla y vertemos agua hirviendo. Tapamos la infusión y dejamos que repose de 5-10 minutos. Pasado este tiempo la colamos y la tomamos. Esta infusión la tomaremos tres veces al día. Si no vamos a estar en casa podemos prepararlo y llevarlo con nosotros en una botella o en un termo.  

 Ejemplo de una infusión digestiva:

      - Manzanilla   25 g
      - Melisa          25 g
      - Hinojo          25 g
      - Pasiflora      25 g
      - Regaliz          5 g